Una imagen vale más que mil palabras y cuando se trata de algunas de las captadas por Pelle Cass valen más que toda una crónica deportiva. Este fotógrafo de Massachusetts realiza cápsulas de tiempo que condensa en una única fotografía. Coloca su trípode y toma miles de fotografías de una concurrida calle o un evento cualquiera y después, únicamente, elige qué omitir y qué dejar en las fotografías al superponerlas unas a otras. De esta forma consigue aglutinar en una única imagen horas y horas de trabajo.
Aunque en su portfolio se pueden ver escenas cotidianas, niños jugando en el parque o personas deambulando por grandes avenidas; lo que más llama la atención es su último trabajo: ‘Crowded Fields’. Desde un partido de tenis hasta una competición de natación, cualquier competición le sirve para sacar su técnica a relucir. Durante un año, asistió a una veintena de competiciones de lo más variopintasen las universidades de Harvard, Boston o MIT para poder recoger todo el caos que se genera entorno a una competición y reunirlo después en una fotografía.
Para realizar estos timelapses puede llegar a tomar hasta mil capturas de un mismo encuentro. Después comienza un arduo trabajo de photoshop, pero sin trampas. Pelle Cass deja claro que no retoca ni un pixel y tan solo elige las figuras que va a dejar y las que prefiere omitir. Este trabajo le puede llevar entre 40 y 80 horas por foto ya que debe revisar una y otra vez todas sus instantáneas.
El resultado puedes comprobarlo por ti mismo en su cuenta de Instagram, donde tiene más de 25 mil seguidores. Aunque se traten de montajes, el fotógrafo asegura que lo que hace es completamente real. Al fin y al cabo, todo ha sucedido antes o después. Un caos visual que refleja que tras el bullicio siempre podemos encontrar cierta armonía.