Carlos Gardel ya dijo aquello de “20 años no es nada” y eso Rayden (Madrid, 1985) lo deja bien claro. El cantante madrileño demuestra que 20 años en la música y 100 canciones pueden ser un suspiro o toda una vida. Con su último disco, ‘Homónimo‘, cierra la trilogía de la palabra que ya inició con ‘Antónimo’ y ‘Sinónimo’. Un disco que golpea con sus mensajes y que, además de cerrar su segunda trilogía, compone una hexalogía con la que el artista se ha ido perfilando de dentro hacia fuera y muestra su mejor y más íntima biografía. Así, para conocer a David Martínez Álvarez solo hay que adentrarse en alguno de sus temas. Puesto que en su trabajo impera tanto el orden, para seguir sus esquemas, hemos preparado esta entrevista por bloques.
BLOQUE 1: Rayden
Con ‘Homónimo’ cierras tu trilogía de la palabra y, además, alcanzas las 100 canciones en solitario. ¿Cabe toda tu vida en estos 100 temas?
Mi vida está resumida en estos 12 temas e, incluso, si me apuras, está resumida en el último tema, la canción número 100. Pero sí, es como mi vida resumida por 12 capítulos. Dice mucho de mí, todo de mí. Ayer en una entrevista le decía a una periodista que para mí las redes sociales no son mi mundo sino que es la programación que le quiero soltar a mi mundo, pero sí que alguien puede llegar a conocerme por mis canciones, totalmente.
¿Eres tan cuadriculado y metódico como tu manera de categorizar el trabajo puede hacernos pensar?
Soy un puto desastre en todo, menos como padre y en la música. Soy un caos desorganizado con patas y es cierto que para lo del trabajo intento siempre que haya una documentación e, incluso, entrevisto a gente, subrayo, post-its y luego lo saco a limpio. Al final, en lo que menos tardo es en escribir la canción. Es más el proceso de antes. Un poco como Dexter con chinchetas, hilos y uniendo todo.
“Soy un puto desastre en todo, menos como padre y en la música”
BLOQUE 2: David
Eres padre de un hijo de una anterior relación. Se habla poco de las familias no tradicionales, ¿cuál es tu experiencia?
Creo que cada vez es menos tradicional decir “familias no tradicionales”. Al final, la familia no tradicional va a ser la pareja que aguanta toda la vida. Mi experiencia es muy buena porque me considero un afortunado porque con la madre de mi hijo nos llevamos genial y somos grandes amigos. Es una pasada que, sobre todo, mi hijo no tenga que vivir ningún tipo de pelea y haya sido una separación porque el amor llega hasta cierto punto. Incluso, ahora, es amor pero desde otro punto y que el niño vea esto y no una mala relación. “¿Sacamos tiempo libre?” Pues los dos con él. Me parece muy bueno, viendo todo lo que hay fuera, menos mal que él no tiene que vivir eso.
También has hablado de tus momentos de ansiedad. ¿Deberían las personas públicas normalizar estas situaciones?
Es fundamental. Yo voy a mi psicoanalista y me encanta ir porque me sirve para perfilarme por dentro y desnudar una serie de cuestiones que, incluso, no vienen de mí de pequeño, vienen del crecimiento con mis padres, mis abuelos y mis hermanos. Creo que es necesario. Quitando enfermedades, pandemias, desastres naturales y accidentes, la mayor parte de las desgracias que ocurren en el mundo son por monstruosidades y deformaciones de la inseguridad, que es lo que fomenta el totalitarismo, las transfobias, homofobias, xenofobias, racismos y desigualdades. Todo nace de una inseguridad que ha crecido mal. Entonces, al igual que si nos duele algo vamos a que nos lo miren, si no sabemos cómo afrontar según qué cosas es primordial. Yo ahora he vuelto a ir a la psicoanalista cuando me encuentro en el mejor momento de mi vida. Ahora es cuando tengo ganas y herramientas de volver aquí y desde otro punto más reposado cuestionarme cosas y entender la lógica de según qué cosas.
¿Cuál ha sido el ataque de ansiedad más grave que has vivido?
El ataque de ansiedad que más recuerdo fue en 2019. Me pilló en el estudio y me encanta decir que yo fui del estudio a la psicóloga. Me dio un ataque muy fuerte e, incluso, me invitó Vetusta Morla a ver su concierto, el gran concierto que hicieron para 40.000 personas y me tuve que ir antes de que empezara porque me dio otro ataque de ansiedad y, ostras, es muy raro porque es algo que no puedes controlar. Luego sí que aprendes a llegar a entender pero cuando te da por primera vez te notas como paralizado, te haces nudillo, te arde la cabeza pero sientes como frío, no sé, es muy raro el no saber por qué ha pasado y no poder hacer nada.
“La mayor parte de las desgracias que ocurren en el mundo son por monstruosidades y deformaciones de la inseguridad”
BLOQUE 3: Actualidad
La detención del rapero Pablo Hasél es un tema de actualidad del que has hablado abiertamente. ¿Con Hasél en la cárcel un rapero como tú se replantea cómo criticar u opinar a través de las canciones?
No, de hecho el videoclip de Don Creíque es una operación a corazón abierto a un antidisturbios, a un cura, a un Cayetano y a un banquero y qué sale de sus tripas. Es el mundo de la cultura de cancelación y el not all de las banderas rojas y de la sociedad tan loca que vivimos y las confrontaciones que ocurren. A mí no me preocupa porque no digo nada que no se haya dicho y, como te he dicho antes, me documento mucho. Además, yo no rozo el eje panfletario, yo hago canciones y me permito, desde la elegancia, dar guantazos pero siempre desde el savoir faire, el saber hacer. Pica más si está bien dicho y está con gusto y con Don Creíque pasa esto. Es una canción que funciona muy bien como canción y que cuando la escuchas dices “madre”. Si la cultura de un país se autocensura, es la muerte de la cultura y habría que entrar en el doble rasero y por qué de un lado sí y otro no. ¿Por qué hay grupos de música nazi que dicen aberraciones? Lo raro es eso, el doble rasero.
Como madrileño que eres, estarás al tanto del terremoto político en la Comunidad. ¿qué opinas?
No me he enterado bien porque cuando pasó entré al taller donde ensayamos, Rockin’ MAD, no tenemos cobertura y cuando salí fue como ¡guau! A ver, hay problemáticas más grandes pero hay que ir a votar, evidentemente, va a haber que votar y yo voy a hacer mi opción al voto e, incluso, me lo ponen más fácil si se hace una coalición de izquierdas. Pero me parece todo un poco bochorno, porque se está perdiendo la empatía con todo lo malo que está sucediendo en este “y tú más”. Es una clase política que no nos merecemos o que si nos la merecemos también tenemos que mirarnos y ver qué hacemos para merecérnosla.
“Tenemos una clase política que no nos merecemos o que si nos la merecemos también tenemos que mirarnos y ver qué hacemos para merecérnosla”
BLOQUE 4: Proyectos
¿Te ves toda la vida dedicado a cantar y a subirte a un escenario o piensas en otras maneras y formas de proyectar lo que sientes y de ganarte la vida?
Lo que estoy haciendo y, sobre todo, con discos como el que he hecho ahora o ‘Sinónimo’, el anterior, son discos que podría hacer con 33 o 35 años o que podría hacer con 50 o 60 años. Entonces, por esa parte, no hay problema. Y lo que estoy haciendo ahora es mostrar mis inquietudes a otro tipo de cosas y creo que ya lo pongo en evidencia. Tanto a nivel de escribir, que ahora estoy con una novela, como a nivel de locución, que también me encanta hacerlo. Una cosa que sí quiero hacer a medio o largo plazo es escribir un musical, no protagonizarlo. Ya he empezado poco a poco. Son inquietudes y no son cosas motivadas por la edad de que los jóvenes cada vez tenemos más años, sino que son inquietudes que tengo y formas de hacerme entender.
Has anunciado un concierto muy especial de aniversario de tu carrera en el Wizink, ¿confías en que podrá hacerse sin problemas?
El 28 de marzo estamos en Bilbao, que se agotó en horas, y parece que empieza a moverse la cosa y los festivales. Lo del Wizink, he puesto toda la carne en el asador. Estamos a menos de 500 entradas de llevar 9.000 entradas y cuando se llegue a las 9.000, sí que vamos a poner entradas agotadas porque es uno de los formatos del Wizink. Si después de septiembre la cosa está bien, se abre para 12.000 y, si se agota, se abre para 15.000 que es el Wizink entero.
“Una cosa que sí quiero hacer a medio o largo plazo es escribir un musical, no protagonizarlo”