Y de repente volvió la noche más importante de la moda. La Gala Met se ha vuelto a poner de largo después de que en 2020 fuera cancelada por la pandemia. Por si a alguien se le había olvidado -comprensible por otra parte, teniendo en cuenta la parafernalia que lo envuelve-, este evento es una fiesta de recaudación de fondos para el Instituto del Traje del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, uno de los establecimientos culturales más emblemáticos del mundo. Es decir, que la Met Gala es la principal fuente de financiación anual del museo para exposiciones, publicaciones y nuevas adquisiciones.
El regreso de este mediático evento marca así la lenta reapertura de la ciudad, devastada por el coronavirus, junto con los espectáculos de Broadway y el US Open. Famosos, artistas, diseñadores y creativos posaron ante los paparazzi en un extravagante ejercicio que empuja los límites de lo que se puede llevar (y no) ante una audiencia mundial.
La Met Gala es el epítome de la exclusividad, pero no fue siempre así. Hay un nombre detrás de la transformación que ha convertido una sencilla cena de recaudación en una oda a la extravagancia: Anna Wintour, directora Artística de Condé Nast, Editora en Jefe de Vogue y actual presidenta de la beneficencia.
“Creo que el éxito se debe a la mezcla de las personas involucradas. Es el elenco de los personajes, y hay un cierto glamour y sex appeal asociado con la Alta Costura”, dijo una vez Wintour al New York Times.
Esa reunión de celebridades y escaparate mundial de las marcas ha provocado que año tras año se batieran récords de recaudación. La del 2019, la última vez que se llevó a cabo, llegó a recaudar 15 millones de dólares. Actualmente una entrada al evento cuesta 35 mil dólares por persona, y las mesas van desde los 200 mil a los 300 mil dólares cada una, según el New York Times. En resumen, se trata de la mayor reunión de gente con dinero y poderosa de todo Estados Unidos. Por ello no es baladí que algunos de sus exclusivos invitados utilicen su exposición para reivindicar causas justas o cambios sociales. A continuación veremos los mejores ejemplos.
Extravagancia, millonarios, flashes, alfombra roja, celebridades, excentricidad, reivindicación y moda, mucha moda. Hemos explorado decenas de perfiles en Instagram para recopilar los mejores looks de esta nueva edición de la Met Gala, que huele a cierta normalidad, aunque no lo parezca.
La apertura
El comienzo de la esperada alfombra roja de la gala MET 2021 corrió a cargo de la banda Brooklin United junto a la gimnasta estadounidense Nia Dennis.
De rojo (y olé)
Permitidnos empezar este repaso con la española más internacional (con permiso de Penélope Cruz). La artista Rosalía, después de muchos rumores, estuvo por primera vez en uno de los eventos de moda más importantes del mundo. Le quedan pocos ya para hacer el check completo. Así lucía minutos antes de pisar la alfombra roja con un vestido del diseñador Rick Owens y que está inspirado en los mantones de Manila, “algo muy español”, dijo cuando los periodistas le preguntaron por el look. Además, en el slide que ha subido a su perfil de Instagram dedica la última imagen a Lola Flores.
Y sin dejar de hablar español, saltamos al otro outfit rojo que también nos ha llamado la atención. Maluma luciendo un traje cowboy style junto a la diseñadora del mismo, Donatella Versace.
Otra de las celebridades que fue de rojo sobre la ‘red carpet’ del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, fue Megan Fox. Cuyo flequillo postizo fue tan comentado como su despampanante vestido firmado por Dundas.
El medio es el mensaje
Hay voces críticas que dicen que un evento de estas características, máxima expresión del capitalismo más voraz y la frivolidad más superflua, no es la plataforma perfecta para lanzar mensajes reivindicativos. Pero tirando de máxima periodística, “el medio es el mensaje”, decía Marshall McLuhan, puede que sí lo sea. Es decir, para los periodistas en la sala, esa teoría venía a decir que se da una relación simbiótica en la que el medio influye en cómo se percibe el mensaje. Para algunos puede que se perciba como pura hipocresía; para otros, una manera efectiva de colar mensajes necesarios en el Olimpo de los no mensajes; y para otros, sobre todo para los aludidos, es un insulto.
En cualquier caso, la edición de este año tuvo proclamas por los derechos de la mujer, a favor de un impuesto a los ricos, reivindicaciones queer y en contra del patriarcado.
Las parejas
Aquellos que fueron acompañados hicieron todo lo posible para no eclipsarse entre sí. En algunos casos, era una tarea difícil de conseguir. He aquí las mejores parejas de la alfombra roja.
De otro planeta
La alfombra roja de esta edición de la MET Gala ha dado lugar a unos outifits de lo más imposibles y otros directamente han traspasado la troposfera para salirse de lo terrenal. Hemos detectado dos looks de otro planeta, el de la cantante Grimes y el de la actriz protagonista de ‘Euphoria’, Hunter Schafer. En el caso de la cantante Lorde, más que extraterrenal se decantó por el misticismo y lo etéreo.
Clásicos, pero con algún toque
Algunos como el actor Channing Tatum o el deportista Stephen Curry decidieron apostar por lo clásico, reivindicando así el esmoquin como baluarte de elegancia. Otros se decantaron por el cuero, pero con toques exhibicionistas. Y Timothée Chalamet, siendo Timothée Chalamet. El rollazo en persona, vamos.
1, 2, 3… ¡puuum!
Lo de posar en la Met Gala es todo un arte. Pero, además, puede ser el escaparate perfecto para marcarte una buena performance. Precisamente en performance tiene un máster el rapero Lil Nas, que no desaprovecha ‘sarao’ para dejar a todos boquiabiertos. En la MET Gala lució tres diseños de Versace que iba descubriéndose por capas.
Y para acabar… WTF!
Y como colofón final a este repaso de la Gala MET 2021, una ristra de looks que no sabemos cómo describirlos y encasillarlos. Eso lo dejamos a conveniencia del lector.
